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En Aurgeenergía, somos especialistas en sistemas de calefacción eficientes y sostenibles que garantizan un ambiente cálido y confortable con el menor consumo energético. Trabajamos con tecnologías avanzadas como suelo radiante, bombas de calor y radiadores de baja temperatura, adaptando nuestras soluciones a las necesidades de cada espacio, ya sea una vivienda, oficina o industria.
Proporciona una distribución homogénea del calor.
Compatible con energía solar fotovoltaica y aerotermia.
Bajo consumo energético y mayor confort térmico.
Ideal para viviendas y espacios amplios.
Alto rendimiento con bajo consumo eléctrico.
Permiten calefacción en invierno y refrigeración en verano.
Pueden conectarse a sistemas de energía renovable.
Opciones disponibles para viviendas unifamiliares e industriales.
Usan agua a menor temperatura, reduciendo el consumo.
Combinables con aerotermia y sistemas fotovoltaicos.
Opciones de diseño moderno y eficiencia energética.
Rápida instalación y mantenimiento sencillo.
Mayor eficiencia gracias al aprovechamiento del calor latente.
Reducción de emisiones contaminantes.
Compatible con sistemas de radiadores y suelo radiante.
Ideal para sustitución de calderas convencionales.
Ahorro en la factura energética con sistemas optimizados.
Reducción de emisiones contaminantes al utilizar energías limpias.
Mayor confort gracias a una distribución homogénea del calor.
La elección del sistema de calefacción adecuado dependerá del clima de la región y del aislamiento de la vivienda o negocio.
Los sistemas de bomba de calor y suelo radiante ofrecen mayor eficiencia y menor consumo que las calderas tradicionales.
Para reducir costes y emisiones, es recomendable optar por sistemas que puedan combinarse con energía fotovoltaica o aerotermia.
Las bombas de calor y el suelo radiante son los sistemas más eficientes, especialmente cuando se combinan con aerotermia o energía solar.
Sí, la aerotermia y la calefacción con energía fotovoltaica son soluciones sostenibles y altamente eficientes.
El suelo radiante proporciona un calor más uniforme y consume menos energía que los radiadores tradicionales, aunque requiere una instalación previa más compleja.
Los radiadores de baja temperatura y las calderas de condensación son opciones adecuadas para renovar sistemas sin grandes obras.